3 amigos, Kike, Carlos y Gorka, tomando café, comentaron que no había en Madrid ningún hotel que se ajustase a sus necesidades y a la de sus amigos. así empezaron a preguntarse dónde les gustaría alojarse si viajaran a una ciudad como Madrid o París.
Llegaron a la conclusión de que debía estar en pleno centro de la ciudad, con una decoración original y un precio ajustado, que no estuviera saturado de servicios que al final nunca usas y con un trato natural de tú a tú. Porque lo único que necesitas realmente para 'patear' la ciudad es un buen desayuno.
Y así abrieron su primer hotel, Room Mate Mario en el centro de Madrid junto al Teatro Real.
Sorprendidos por la entusiasta acogida que tuvieron por los clientes y por los medios de comunicación decidieron crear una cadena de hoteles y apartamentos urbanos.